Ha sido muy fácil y rápida de hacer, y los ingredientes son chocolate, galleta, mantequilla, azúcar y esencia de vainilla. En un molde para tartas se hace una base de galleta triturada y mantequilla, mientras que en un cazo derrites chocolate (250 gramos), azúcar (al gusto), mantequilla (200 gramos), y galleta triturada (mínimo medio paquete), y le añades un chorrito de esencia de vainilla. Cuando tienes todo bien integrado lo viertes en el molde, y una vez que haya enfriado se deja reposar en la nevera al menos una hora.
Ya veis que es súper fácil, apto incluso para los más torpes en la cocina. Y para darle un toque acorde con estas fiestas la he decorado con azúcar glass dibujando una corona. ¡Felices Reyes!
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