Galletas de mantequilla surtidas

Finalmente llegó el otoño a Bilbao, y con él, llegó el frío y las lluvias, aunque por el momento no podemos quejarnos. La tarde el pasado sábado fue una de esas tardes desapacibles, a las que si sumamos que con el cambio de hora anochece muy pronto, y con un enano de dos años, lo que apetece es hacer un plan hogareño. Así que decidí aprovechar la tarde casera que tenía por delante, y hacer galletas de mantequilla, que hacía mucho que no las catábamos en casa.

Mis favoritas son las galletas de mantequilla cubiertas con chocolate, pero quise hacerlas surtidas y probar algunos nuevos sabores, así que las hice también de canela y azúcar, y con mermelada de calabaza.

Las de canela quedaron ricas, pero las que me sorprendieron mucho y que voy a repetir en más de una ocasión fueron las de mermelada de calabaza, porque me encantaron. Y qué decir de las de chocolate, con esas siempre se triunfa. 

Estas galletas son ideales para acompañar el café, y siempre quedas bien si las llevas a una comida con amigos para degustarlas en la sobremesa, aunque es un vicio tenerlas en casa... Yo las meto en una lata para galletas, ahí se conservan en perfecto estado, aunque no sé deciros cuánto tiempo, porque en mi casa nunca llegan a la semana.