Hoy se casa una compañera de trabajo, y como todas las novias quiere que su día sea especial. Una forma de hacer una boda original es añadir detalles poco vistos, ya sea a la ceremonia, a los regalitos...
Como su futuro marido trabaja en una distribuidora de productos cosméticos, decidieron que las mesas del banquete se llamarían cada una de un producto distinto: mesa maquillaje, mesa pintalabios, mesa colorete, etc. Y me pidió que hiciese galletas decoradas para cada mesa, para poner en el sitio de cada comensal, y este ha sido el resultado:
Ya veis, hay de todo: colorete, máscara de pestañas, laca de uñas, pintalabios, brochas... Y a ser posible, de las marcas con las que trabaja el novio, para que todo quede en casa.
Preparé galletas de mantequilla y galletas de jengibre, para añadir aún más variedad al surtido. Y como al fin y al cabo se trata de galletas de boda, la presentación debe ir acorde, así que las presenté en bandeja de mimbre cubierta con papel de seda, ¿os gusta como queda?
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